Gran hotel. Las habitaciones son bonitas y limpias...
Gran hotel. Las habitaciones son bonitas y limpias y también huelen bien. Las ventanas son grandes y, desde el octavo piso, ofrecen una gran vista. Las duchas son muy bonitas y el personal es muy amable.
Desayunar aquí es un placer. Mucha variedad (jamón y huevos, pan fresco, frutas ...). El restaurante tiene techos altos y ventanas de vidrio en lugar de paredes para mirar hacia afuera.
El hotel también tiene un color rojo distintivo en las paredes exteriores y se puede ver a kilómetros de distancia. Todo el hotel está decorado con adorables colores rojo-negro.