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Robin Tiffany

3 hace años que

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Atención al detalle: mía. Al acercarse al hotel, sabrá que está en un lugar diferente. Te has convertido en parte del pasado de la ciudad, de una manera exclusiva. Me recibieron en la puerta principal, la bienvenida fue cálida para una viajera soltera, en jeans, chaqueta de cuero andrajosa, bufanda de lana vieja y guantes. Debería haberme sentido fuera de lugar, pero me envolvió la calidez del personal que era claramente parte de lo que era este antiguo edificio ... algo viejo y olvidado con una nueva vida insuflada. Eso sí, no me refiero a remodelado, me refiero a restaurado con amor a su antigua dignidad. El arte y los artefactos de su pasado hablan de su vida anterior, de cómo fue parte de una ciudad industrial en crecimiento, de los que llegaron todos los días de su vida laboral y trabajaron. Sí, podía relacionarme y me sentí cómodo allí. Cuando las puertas del ascensor se abrieron, fui recibido por un cachorro grande y su humano esperando su turno. Su cola meneando y una mirada de aprobación de su humano y mi bienvenida fue completa. Ellos también eran invitados. Mi habitación tenía grandes ventanales a lo largo de una pared que daban a uno de los vecindarios de la ciudad en las primeras etapas de avivamiento, renacimiento. Había ganchos resistentes para abrigos de cuero y un banco que emergía de la tosca pared de ladrillos, invitando a uno a sentarse y quitarse las botas. Oh, esto tiene sentido, la herencia de la ciudad es rica en Harley Motor Cycles. Es un toque acogedor. El baño es precioso para trabajos pesados. No muy bonito, sino un lugar donde pasar el día se siente cómodo. Y las toallas, bueno, ¿quién menciona las toallas en una reseña de hotel? Estos son dignos. En definitiva, el espacio es cálido y te hace sentir parte de la historia. Cené en el bar las dos noches que estuve allí. Los camareros se aseguraron de que me sintiera parte de la multitud, tratándome como si fuera un habitual. Hicieron que fuera fácil estar allí solo. Este no es el bar de un hotel normal. Es parte de la cultura de este vecindario, donde los trajes de oficina y los tipos de capital social industrial eligen relajarse en su día. Como observador, fui un privilegiado.
Dejé este lugar renovado ... elevado ... en paz. No vine a buscarlo. Me encontró.

Traducido

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